martes, 30 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. Gijón-Castro Urdiales-El Enciso

El 1 de julio a las 20.00h. salimos de Gijón rumbo a Castro Urdiales. Aunque solo nos separan 233 Kms llegamos allí pasadas las 00.00h, después de haber parado a comprar corbatas en Unquera y cenar a unos 40 kms de nuestro destino.
Ya en Castro Urdiales nos dirigimos al punto que nos habían recomendado en Acpasión, el final de la Avda. Riomar, junto al parque Cotolino.

Primera sorpresa del viaje. Castro Urdiales estaba en fiestas y era el día de los fuegos. El parque estaba lleno de coches y de gente viéndolos, así que allí mismo, en una pequeña rotonda que hay al final, nos detuvimos a verlos también. Luego solo tuvimos que esperar unos minutos a que la gente se fuera y encontramos sitio para aparcar.

Segunda sorpresa del día o mejor dicho de la noche. En un piso del edificio cercano a la Ac hicieron fiesta hasta más allá de las seis de la mañana. Mi padre se llevó la peor parte, porque no pudo dormir. Los demás dormimos como lirones.












2 de julio. A la mañana siguiente despertamos con unas vistas impresionantes de la playa de Brazomar.






Aunque habíamos pensado en desayunar e irnos rumbo al Enciso, decidimos dar un paseo.









Descubrimos un Castro Urdiales precioso, lleno de rincones especiales. Visitamos la zona antigua y sus restos de Iglesias y Castillo y también paseamos por sus calles (menudas cerezas de picota que compramos en una tiendina regentada por chinos. De diez!)







Por ultimo, un chapuzón en la playa (el agua estaba algo revuelta y sucia), unos juegos en la arena, comida ligera (la Ac no se movió y aunque tuvimos que pagar la OCA (hermana de la ORA), nos mereció la pena. Se quedó a la sombra y comimos dentro estupendamente) y salimos con destino Enciso.






Nos pusimos en marcha a eso de las 16.00 h. e hicimos los 227 kms en 5 horas mas o menos. El tiempo se nos disparó porque marcamos la opción de "sin peaje" en el Tomtom y nos llevó por un puerto de montaña camino de Vitoria. Novatadas del Tomtom. No olvidamos la lección: cuando pregunta: peajes? hay que marcar NO (y leer que en pantalla pregunta: Evitar peajes?)




En el Enciso nos dirigimos al área de Arnedillo. Es un área bonita, con vaciado y llenado, electricidad de pago (la hora a 1 €) y muchas Acs a nuestra llegada.








Fue una pena que se pusiera a tronar y llover al poco de llegar, porque había muchos niños con los que jugar. Las peques tan solo consiguieron dar una vueltecita, ver unas ovejas y a refugiarse de la lluvia que nos acompañó toda la noche.



lunes, 29 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. El Enciso - Zaragoza - La Pineda








3 de julio. Salimos hacia Enciso a las 11.00. Está a tan solo 15 minutos del área.
Aparcamos a la sombra en el parking de El Barranco Perdido (justo antes de llegar al parking habilitado al final del pueblo giramos a la izda por un pequeño puente).
Visita al centro de interpretación, interesante y entretenido, con muchos videos, restos y maquetas. También pequeña zona de ludoteca.
A las 12.00 h. en la plaza del pueblo parada para ver el dinosaurio que sale rugiendo del reloj y paseo en coche hasta Valdecevillo, donde vimos huellas y reproducciones a tamaño real de varios dinosaurios que en definitiva fué lo que más gusto a las dos peques.

Intentamos acercarnos a las Pozas, pero no dimos con el camino adecuado y terminamos en el balneario, lleno de coches y sin casi espacio para girar.

Decidimos comer a la entrada del pueblo, en el área de descanso del parque El Castillo (no tiene de área más que la zona para aparcar) y allí se nos acercó un agricultor de la zona que nos preguntó porque ya no veía Acs aparcadas allí. Le explicamos que existía un área y quedó en subir todas las mañanas a ofrecer fruta. Merecería la pena, porque lo vende todo a 1€/kg. Nosotros le compramos unos cuantos de riquísimas almendras y nos regaló varios puñados de ciruelas que estaban buenísimas. Una pena no haberlo visto primero cuando llevaba la furgo llena de melocotones, nectarinas, etc. Ya le pillamos de regreso y a penas le quedaba mercancía.

Después de comer, café y helado, salimos rumbo a Zaragoza. De nuevo llovía.


De camino nos pilló una granizada y una tormenta tan fuerte que los coches se comenzaron a parar en el autopista y tuvimos que imitarles. Imposible ver. Menudas piedras que caían! Increíble.









Llegamos a Zaragoza de tarde y aparcamos en el paseo de la Ribera, como nos había indicado un compañero del foro Acpasion. Desde allí en un paseo estas frente a la Basilica del Pilar. Grandiosa. Una pena que, para variar, nos alcanzase la tormenta que nos perseguía. Nos dio el tiempo justo de ver el templo, hacer unas fotos por la plaza, tomarnos un helado en una terraza de la misma y salir pitando a refugiarnos del diluvio que cayó. Dejamos pendiente una nueva visita con menos agua y mas tiempo para ver y conocer.













Después de cenar en el mismo paseo de la Ribera salimos rumbo a Montblanc. Sin embargo las niñas se durmieron enseguida y decidimos seguir viaje hasta La Pineda. Llegamos de madrugada a las puertas del hotel que teníamos reservado, después de que el Tomtom nos perdiera, enviándonos a otra dirección.









4 de julio. Después de una noche de mucho calor donde mi querido marido casi recibe un linternazo por andar a oscuras por dentro de la Ac y poner un ventilador de 12v. que metía mas ruido que un reactor a las tantas de la madrugada, entramos en el apartamento donde pasamos una semana de lujo. Piscina, playa, Portaventura, viaje a Tarragona y paseitos. Genial.






domingo, 28 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. 5 y 6 de julio: Portaventura

Montando con mi hija mayor en Coco Piloto



Sesamo Aventura y el Dragon Khan al fondo



Tiendas y mas tiendas para perder el gusto... y el dinero



Aqui nos montamos los cuatro y disfrutamos un montón.



Mi hija mayor bailando la danza del pareo con las polinesias.



Para subir hay que tirar de la cuerda, la caida viene sola!



Las tazas locas en China



Las peques disfrutaron muchisimo conduciendo solas en los "bufalos de choque". No podriamos decir cuantas veces se montaron. Por supuesto, no habia cola.





Zona de parque. Inmenso. Les falto tiempo para explorarlo en profundidad. Las fotos no le hacen justicia.












Todo parecia de gominola, en Sesamo Aventura



sábado, 27 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. 9 de julio: Tarragona



Playa el Miracle




Castells frente al portico de la catedral



Anfiteatro romano s.II d.C.






Pretorio romano, s.I d.C.





Museo Nacional de Arqueologia de Tarragona.





Catedral de Tarragona, con portada gótica.






Fuegos artificiales. Semana de festival.



viernes, 26 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. 11 al 13 de julio: Peñiscola






Terminada nuestra estancia en La Pineda tomamos rumbo a Peñíscola.


Nos costó localizar el área, a pesar de tener las coordenados, por imprecisión de nuestro querido Tomtom, pero al final dimos con ella. Para nuestra sorpresa estaba casi pegada a un complejo de apartamentos donde estuvimos hace algunos años y que nos dejó huella: Apartamentos Tamarindos.






El área estaba muy bien. Con duchas, agua, vaciado, wc y electricidad. El precio 11 euros sin luz y 12 con ella.





Desde allí nos movimos al centro de Peñíscola en bus, que pasaba cada media hora mas o menos por el módico precio de 60 céntimos.







Peñíscola es preciosa, ya lo sabíamos, aunque con unas niñas que solo quieren jugar y correr es difícil de ver. Aún así, disfrutamos mucho, vimos el espectáculo de aves rapaces, donde mi hija mayor sostuvo un halcón en su brazo, nos bañamos en el mar, jugaron en la arena, paseamos y cómo no podía ser de otro modo, nos protegimos de la lluvia comiéndonos unas copas de helado. Y eso que el hombre del Área había comentado que en Peñíscola era imposible que lloviera en julio, si apenas llovía en invierno.... Pues llovió y de que modo!




jueves, 25 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. 14-15 de julio: Cuenca












parking del auditorio



Partimos a mediodía, rumbo a Cuenca. Un viaje sin incidencias y sin prisa. Al llegar a Cuenca nos dirigimos al Camping el Pinar, en el Pinar de Jabaga. Habíamos decidido entrar en un camping para que las niñas volvieran a disfrutar en la piscina y no soportar el calor que hacía. Primera sorpresa. El camping estaba cerrado al publico.




Decidimos entonces ir al Camping Caravaning Cuenca. Al llegar allí nos informan de que el precio por noche nos sale por unos 30 auros y que si solo es para una noche debemos abandonar el camping antes de las doce, como en todos. La sorpresa (aparte del precio) es que la piscina cuando llegamos (a eso de las siete) ya está cerrada y al día siguiente no abre antes de las doce, así que no podríamos darnos ni un chapuzón. Con ese panorama decidimos ir a dormir a Cuenca. Pasamos de piscinas!





Ya en Cuenca nos dirigimos al parking que hay junto al Auditorio. Esta cerrado con unas cadenas y dentro había alguna furgoneta, pero ni una autocaravana a la vista.









Estuvimos a punto de irnos a alguna calle de Cuenca que habíamos visto al pasar, donde había un parque enorme (así que acudimos al día siguiente para regocijo de las crías) y mucho sitio para aparcar, pero al final, mi padre, investigando, descubrió que en le parking subterráneo había alguien cobrando. El encargado nos indicó que quitáramos la cadena y aparcáramos, que su compañero ya pasaría a cobrarnos por la noche. Así lo hicimos y ocupamos una plaza enorme con vista al casco antiguo.









Paseito para abrir el apetito y descubrir una zona preciosa que tendríamos que ver al día siguiente, pues la hora de cenar se acercaba y las peques ya estaban cansadas. Aún así, después de cenar nos fuimos a dar un paseo por el centro, pero al ser un día por semana no había nadie, ni casi nada abierto. Decidimos dejar las visitas para el día siguiente y nos fuimos a dormir. Del vigilante, ni rastro.







A la mañana siguiente mi padre se acercó a la oficina de información turística que está allí mismo, en un extremo del parking y le indicaron el parking del Castillo, con unas vistas increíbles de la ciudad y gratuito. En ese mismo momento apareció el vigilante y le dijimos que queríamos salir (seguían las cadenas) y le seguimos para que nos cobrara. Nuestra sorpresa fue que nos cobró la parte proporcional desde las 9 de la mañana a las 10.30 mas o menos . Osea, unos 50 céntimos. La noche que pasamos fue regalada.






El parking del Castillo está en lo mas alto, después de pasar el ayuntamiento, las iglesias y todos los monumentos del casco antiguo. Es una explanada muy grande, donde paran los autobuses y el tren turístico. Allí también hay una oficina de información turística, aunque la persona que nos informó de donde estaba la fuente, de que podíamos dormir allí tranquilamente, sin problemas de multas, etc, fue un amable barrendero.














El lugar es inmejorable para ver todo lo que hay que ver en la zona antigua de Cuenca. Nosotros bajamos andando y descubriendo los rincones, las callejuelas que nos conducían a vistas preciosas y edificios curiosos. Llegamos al ayuntamiento donde echamos un ojo a sus tiendas. Fuimos a ver las casas colgantes (sorprendente que se la conozca por sus casas, cuando solo son dos) y también aprovechamos para comprar pan y un dulce de membrillo con nueces que estaba para quitarse el sombrero. Para volver al parking cogimos el autobús, que nos costó unos céntimos (creo recordar que 20 por persona) y nos ahorro una buena caminata cuesta arriba.






Sin embargo, el parking también tiene una parte mala y es que de noche es un lugar de botellón y de reunión para la juventud. Cuando volvimos de nuestro paseo descubrimos que en el parking, según se llega a mano izquierda, había coches con los maleteros abiertos, la música alta y preparados para hacer fiesta. Así que decidimos movernos y colocarnos en el lado derecho, justo donde termina el parking y junto a la fuente y los bancos. Error. La policía vino a hacer su ronda y los chavales que iban a hacer el botellón desaparecieron por arte de magia. Sin embargo, nuestro lado fue sitio de reunión de juventud, que ocuparon los bancos y se pusieron a contar batallitas y anécdotas hasta las tantas de la madrugada. Así, hasta bien entrada la noche tuvimos compañía y escuchamos risas y conversaciones. Eso sí, nada fuera de tono, ni gritos, ni borrachos. Muy llevadero. Si hubiéramos querido podríamos habernos movido y alejado de las charlas, pero como no molestaban demasiado, preferimos quedarnos y dormir a pierna suelta.



















miércoles, 24 de agosto de 2011

Vacaciones 2011. 15-17 de julio: Buendia

Salimos de Cuenca por la mañana con destino Buendía. Allí nos íbamos a encontrar con unos amigos a los que hacia mucho tiempo que no veía.

Ellos tienen unos fines de semana en unas parcelitas a la vera del pantano.


Fué un bonito reencuentro. Varias generaciones juntas recordando momentos inolvidables, divertidos y algunos muy emotivos evocando a los que ya no están.


Al día siguiente nos hicieron de guias y nos acompañaron a ver Las Caras de Buendía, en la ruta conocida como la Ruta de las Caras.

Solo pudimos ver unas pocas, porque el calor apretaba en exceso para nosotros, pero aún así nos llevamos una grata sorpresa al contemplarlas.
































Después del caluroso paseo nada mejor que un buen baño y una magnifica paella realizada por Roge hijo y que estaba riquísima.















Por la tarde nos acercamos a Durón, donde Geles y Jorge tienen otro fin de semana y nos dimos una vuelta en su "yate" que nada tiene que desmerecer de los que hay en Marbella. Disfrutamos los once muchísimo, tanto grandes como pequeños y los más atrevidos hasta nos dimos un chapuzón en el pantano! Por no falta, no faltó ni un refrigerio para tomar mientras estábamos anclados en medio del agua. Estos madrileños piensan en todo!





Fué un fin de semana inmejorable, donde esta familia nos agasajó con todo tipo de atenciones y se comportaron como unos estupendos anfitriones. Mil gracias

martes, 23 de agosto de 2011

Vuelta a casa.




El domingo fué el viaje de regreso a casa. Salimos de Buendía por la mañana y después de las consabidas paradas para comer y descansar llegamos a Gijón por la tarde, poniendo así fin a un viaje inolvidable por ser el primero y por los buenos momentos que vivimos.

Para otro viaje tan largo habrá que esperar a otras vacaciones. Ahora llega el tiempo de las escapadas...



Sitios para pernoctar:


-Castro Urdiales. Sitio para dormir en Avda. Riomar, junto al parque Cotolino. Hay parquímetro.

N 43º 22' 24'' W 3º 12' 30''



-Enciso. Área de Acs. Gratuita

N 42º 12' 44'' W 2º 14' 22''



-Zaragoza. Zona para aparcar y pernoctar en paseo de la Ribera, cerca del punte del Pilar (de hierro). Gratuita

N 41º 39' 28'' W 0º 52' 20''



-Peñíscola. Área de la Mercera en la carretera vieja de Peñíscola (casi llegando a Benicarló). 12€ noche

N 40º 23' 85'' E 0º 24' 79''



-Cuenca. Parking bajo el auditorio, de pago. 15€ día entero

N 40º 4' 35'' W 2º 7' 45''



-Cuenca. Parking del Castillo, calle Larga. Gratuito

N 40º 4' 55'' W 2º 7' 33''